LIBERACIÓN DE ENERGÍA DEL CAMPO ATÓMICO
UNA ALTERNATIVA COLOMBIANA
IVÁN DARÍO GONZÁLEZ URÁN
INTRODUCCIÓN
Normalmente
se piensa que la dificultad principal para fabricar un dispositivo nuclear está
en el diseño del mismo. Con el fin de desvirtuar la idea vamos a mostrar, de
forma sencilla, la estructura de las primeras armas atómicas y como es de fácil
disponer de ellas. Así mismo pretendemos, con esta presentación, contribuir a
la creación de mentalidad tecnológica colombiana aplicada al ámbito militar.
Estudios de
esta naturaleza presentan obstáculos técnicos, económicos y políticos. En
primer término es habitual el secreto mantenido por las naciones que han
desarrollado capacidad atómica para su seguridad nacional.
El sigilo
en el área técnica podemos subsanarlo con nuestra creatividad. Así logramos un
paso importante en el conocimiento y en el enriquecimiento tecnológico
nacional. También quedará claro que las principales restricciones están en el
campo económico y político y no en la inventiva.
Como
segunda medida. Los procesos industriales para obtener los materiales
requeridos son complejos. La logística especializada y la peligrosidad en el
manejo incrementan los costos considerablemente. Además requiere de personal
calificado en conocimientos de restringida difusión.
Los costos
para montar las instalaciones y los laboratorios son el principal obstáculo
para que un país como el nuestro pueda ejecutar un proyecto de esta índole. Sin
embargo los materiales están proliferando por el creciente uso de la energía
atómica para generar electricidad.
No solo la
producción facilita su consecución. La necesidad de deshacerse de los elementos
resultantes y las restricciones económicas están estimulando su
comercialización entre los países productores y los no productores. El alto
valor de estas sustancias está propiciando un mercado negro cuando los
controles en las plantas nucleares no son muy estrictos y los operarios sufren
necesidades económicas.
En el campo
político. Solo bajo un inminente riesgo nacional puede darse la voluntad para
apropiar los recursos necesarios para una aplicación puramente bélica. En
nuestro caso debemos tener presente la prioridad actual del mejoramiento social
del pueblo colombiano mientras no se presente una imperiosa situación
internacional.
La
consecuencia de no investigar en este campo el de que no hacemos nada por
progresar en el campo de la investigación analítica. Los costos propios de la
investigación analítica son aceptables por no demandar prácticamente ningún
dinero. En el caso futuro de vernos obligados a un máximo esfuerzo militar, por
razones de seguridad nacional, vamos a tener una situación difícil para
adelantar un proyecto de estas características.
Continuando
estáticos en el presente, tendríamos que partir de cero cuando se necesite a
pesar de haber tenido la oportunidad de anticipar la parte inicial y básica del
proceso. Como lo son los estudios teóricos.
Para
contribuir a subsanar la deficiencia actual en la materia, el siguiente
análisis muestra un prototipo de la primera generación de liberadores de
energía atómica no controlada. Es la partida para cuando se tenga la necesidad
de convertirlo en realidad. Esperamos que tal hecho no tenga lugar. Pero en
este tema nunca es tarde estar preparados.
GENERALIDADES
La energía
cósmica proviene de las transformaciones de la materia en el interior de las
estrellas como parte del proceso evolutivo del universo, en forma natural
y espontánea. Cuando se reúnen las condiciones, en un cuerpo celeste, para
iniciar el fuego atómico, el fenómeno se dispara dando lugar al nacimiento
de una fuente de energía que llena el espacio con su radiación. Es el cotidiano
espectáculo visto en las noches como lo son las románticas estrellas.
Después de
una chispa inicial, el proceso se retroalimenta manteniéndose activo como
fuente de luz, calor y radiación durante millones de años. Nuestro sol es
un ejemplo. Y el combustible es la materia en una constante transformación
liberando energía.
El fenómeno
puede ser generado en nuestro medio. Los factores que debemos reunir y lo
extremo de sus magnitudes, hacen difícil la reproducción en el ambiente
terrestre en la misma forma como sucede en el espacio. Sin embargo, podemos
producirlo en pequeña escala con otros procedimientos y siguiendo pasos
similares a los que se presentan en el universo.
Con el fin
de facilitar la comprensión del diseño hemos evitado la parte cuantitativa para
concentrar la atención en la estructura y el funcionamiento del dispositivo.
Conociendo
la operación del sistema se pueden hacer los cálculos necesarios por una
persona calificada en el tema.
REACCIONES ATÓMICAS
Existen dos
formas básicas de extraer la energía contenida en la materia que componen la
naturaleza.
El proceso
de desintegración o integración atómico es una aplicación de la teoría que
considera la materia como una forma de energía. El primero es denominado Fisión
y el segundo Fusión. Es la clasificación habitual de las técnicas de liberación
de la energía a nivel de partículas fundamentales.
Todos los
cambios en la naturaleza, tanto cósmicos como terrestres, buscan el estado de
equilibrio y estabilidad donde no suceda ninguna transformación. Por eso
decimos que algunos elementos son más inertes que otros. Pero
esa tendencia no es evidente en los átomos de estructuras complejas. En
forma espontánea, los últimos, están perdiendo partículas y emitiendo energía
en una constante evolución. Las sustancias compuestas por estos átomos son las
conocidas como Radioactivas y ocupan los últimos lugares en la Tabla Periódica
de Elementos.
Los
Elementos Radiactivos se encuentran dispersos en la tierra en bajas
concentraciones. Procesándolos podemos reunir las cantidades y calidades
necesarias para una aplicación práctica. Una forma de hacerlo es con métodos
controlados en instalaciones industriales y en los ya comunes reactores
atómicos de generación eléctrica.
El Uranio
natural esté constantemente emitiendo radiación sin causar mayores efectos en
el medio ambiente debido a su baja concentración. El fenómeno, de manera
natural, es a largo tiempo. A tal punto que la pérdida de sus características,
para convertirse en un elemento más estable, requiere de millones de años.
REACCIÓN POR FISIÓN
La Fisión
Natural es la degradación de la materia a nivel atómico que se muestra como la
radioactividad espontánea.
Para
nuestro propósito, es la misma transformación pero acelerada de manera
artificial. La fisión acelerada hace que la transformación suceda en firma
instantánea creando un foco concentrado que genera una explosión. Es hacer que
transcurran millones de años de lenta mutación, en fracciones de segundo.
Una fisión de estas características, puede generarse de diferentes maneras pero
el método más elemental es la primera parte de este análisis.
Para crear
un dispositivo de fisión es necesario tener en cuenta que los átomos de
estructura simple son más estables que los de estructura compleja. Por lo
anterior, debemos emplear átomos de núcleos pesados de significativa
inestabilidad que facilitan el rompimiento y disminuyen las complicaciones
técnicas. Tal inestabilidad y rompimiento está muy ligado con un fenómeno que
se denomina la “Permeabilidad del Núcleo Atómico”.
Con
materiales emisores, como por ejemplo el Plutonio, conseguimos la radiación
necesaria para atacar fisionar la mayor cantidad posible de átomos. Estos, a su
vez, cuando se rompen, generan más partículas que actúan sobre otros átomos.
Así, sucesivamente, produciendo una reacción en cadena exponencial que se
retroalimenta. Es una acumulación de energía en progresión geométrica.
MASA CRÍTICA
Para que lo
anterior sea posible se debe disponer de una cantidad y concentración mínima de
átomos emisores próximos a la inestabilidad y permeabilidad.
Esto obliga
a la obtención de una calidad y cantidad específica del material para
concentrar la radiación que genere la reacción creciente.
Las
dificultades técnicas para lograr la calidad demandada determinan un límite de
aceptación en la cantidad material necesario. Es así como la baja
concentración, no lograble en el proceso de purificación, se suplen con la
cantidad. Balanceando estos factores definimos la cantidad de material como el
mínimo necesario para causar el efecto retroalimentador que libera una emisión
instantánea de energía.
La relación
mencionada determina el concepto denominado "Masa Crítica". Si no se
tiene la Masa Crítica, no es factible producir la fisión por el simple método
que se expone más adelante.
Existen
"otras técnicas que simplifican el diseño, pero no pertenecen a la primera
generación de dispositivos de desintegración atómica.
La masa
crítica puede disminuirse con materiales radioactivos refinados y con avanzados
iniciadores, que emplean osciladores de Energía Electromagnética Resonante. La
miniaturización ha permitido la capacidad atómica incluso en proyectiles de
artillería convencional.
De esta manera la masa crítica también
se determina por las características del mecanismo iniciador de la fisión
atómica. Una baja concentración de isótopos inestables requiere de un potente y
voluminoso iniciador. Y lo contrario, si la masa crítica es rica en átomos
inestables puede usarse un pequeño y sofisticado iniciador.
Llegando a la miniaturización.
SISTEMA INICIADOR
El
iniciador es similar al llamado "Multiplicador" en un sistema de
demolición convencional. O la espoleta de una carga explosiva. Su función es la
de desestabilizar el componente principal de la carga detonante.
Existen
diferentes diseños de una bomba atómica. Pero solo trataremos la técnica más
elemental que se ha empleado para lograr el fenómeno de la fisión generalizada.
La
radiación se emite en todas direcciones desde un material radioactivo y la
concentración de esa radiación disminuye en relación geométrica con la
distancia del emisor. Es como si se estuviese produciendo una lenta explosión
durante muchos años y que puede ser acelerada artificialmente.
La idea
consiste en confinar y revertirla, sobre si misma, empleando un sistema que
detenga la fuga indiscriminada. De tal forma que no solo pueda confinarla sino
también concentrarla hasta alcanzar la saturación necesaria para su
autoexcitación. Es una barrera que atrape la energía emitida causando una
autoirradiación. Si se usa el material emisor adecuado y un mecanismo de
atrapamiento eficiente, la cantidad de energía activa, reunida en el foco,
alcanzará el nivel necesario para causar una destrucción masiva de átomos en
forma caótica y descontrolada.
El efecto
final es una intensa agitación de las partículas que produce más desintegración
atómica, con su propia radiación natural más la que resulta de la interacción
entre la irradiada y la latente que se encuentra en su interior.
INICIADOR CON ESCUDO DE ENERGÍA
La
capacidad de penetración de la radiación dificulta el confinamiento en
contenedores, reflectores o corazas de confinamiento. Tenemos que usar un
escudo dinámico capaz de encerrar las emisiones en la cantidad necesaria para
causar la destrucción de otros átomos, creando así el primer eslabón de la
reacción en cadena.
La
característica principal de esa pantalla
tiene que ser su capacidad de concentración. Para esto se emplea una onda de
choque de alta energía (Plasma) implosiva que retiene la radiación.
Se obtiene
la implosión de la magnitud necesaria con un adecuado diseño del sistema
iniciador. La vía más práctica para conocer las particularidades de la
implosión es sabiendo el mecanismo de una explosión.
FORMA DE UNA EXPLOSIÓN
Cuando
producimos una explosión convencional se causa una concentración de gases a
elevada temperatura y presión. Esta concentración instantánea se disipa
empujando hacia el exterior en todas direcciones. La propagación a alta
velocidad en la atmósfera crea un frente de llama y una onda de choque con
capacidad de daño.
FORMA DE UNA IMPLOSIÓN
Por el
principio de acción y reacción, la fuerza que impulsa hacia el
exterior a una explosión implica una reacción contraria hacia el interior,
conocida como implosión. La implosión se dirige al centro, causando una alta
concentración energética.
La idea es
adecuar el efecto implosivo para generar una barrera de energía con capacidad
de contener la radiación.
FACTORES PARA CREAR UNA FUERTE IMPLOSIÓN
TIPO DE MATERIAL
La magnitud
del efecto implosivo depende de la fuerza de la explosión. Entre más fuerte sea
la explosión mayor es la implosión. Es necesario el empleo de explosivos de las
mejores características y propiedades como los "Explosivos Plásticos"
que poseen buena estabilidad y alta potencia. Como el manejo de las fuerzas
internas de una explosión es complicado y controlar para causar la implosión,
la forma práctica de hacerlo es crear una explosión manejando un “tren
explosivo de cargas dirigidas”.
CARGA DIRIGIDA
La onda de
choque explosiva podemos manipularla para que se dirija hacia el interior
creando una onda de choque lenticular dirigida aplicándola en el lugar
necesitado, que es el material radioactivo.
La onda de
choque dirigida se comporta según la forma de la carga. Las cargas lenticulares
permiten calcular el punto focal donde se máxima la potencia. Utilizando cargas
dirigidas fabricadas con explosivos de alto poder se produce el efecto
sumatorio necesario para la barrera de energía que necesitamos.
IMPLOSIÓN CON CARGAS DIRIGIDAS
Organizando
las cargas de tal manera que las ondas de choque explosivas dirigidas se enfrenten
unas con otras en un mismo punto, obtenemos una fuerte implosión premeditada.
La
confluencia de estas explosiones, en un mismo punto, tiene más potencia que la
simple implosión producida en el interior de una carga explosiva cuando detona,
porque es la implosión que resulta de concentrar explosiones empleando cargas
dirigidas. El sistema de disparo se calculará para obtener la simultaneidad
necesaria.
TREN IMPLOSIVO
Otro efecto
multiplicador a aplicar es el "tren implosivo”. Este consiste en la sincronización
de las ondas de choque provenientes de una serie de cargas
implosivas. La secuencia implosiva es organizada para que las ondas de choque
se adicionen creando una onda final amplificada.
El tren
implosivo es detonado calculando la velocidad de propagación del frente para
asegurarse que la onda de choque inicial se sumará a la siguiente y así,
progresivamente, con las demás.
Esta
secuencia puede hacerse de cuantas etapas como sea requeridas, hasta generar la
barrera energética para contener la radiación que queremos atrapar.
El cálculo
de la velocidad requiere de precisión, porque así como se logra la sumatoria de
las ondas, puede llegarse al efecto atenuador, con la consiguiente pérdida de
lo acumulación de potencia. La simultaneidad de las cargas iniciadoras también
debe estar dispuesta con exactitud.
El
resultado final es un tren implosivo de cargas dirigidas de explosivo que
condensa su poder en la medida que se aproxima al punto focal.
CONSIDERACIONES ADICIONALES
ESTABILIDAD DE LAS ETAPAS
El material
explosivo es normalmente estable pero es activado por un frente de llama
fuerte. Solo es necesario iniciar la carga externa y esta actuará de excitadora
de las cargas internas en secuencia progresiva.
Las cargas
pueden organizarse en un orden de estabilidad creciente por resonancia en la
dirección de propagación del frente de llama. Iniciamos el tren por la parte
externa donde la carga es de menor mayor potencia para haga efecto de
contención y esta excita, con su detonación, las cargas internas. Esto nos
evita una implosión descontrolada que no siga la mecánica requerida.
EFECTO RESONANTE
El tren
implosivo, organizado en la forma descrita, causa efecto resonante en las ondas
de choque aumentando su poder hasta causar el colapso general. El efecto
resonante tiene la característica de acumular energía hasta el nivel requerido
para actuar sobre una masa crítica.
En la
medida que la onda implosiva se dirige al interior, ganará la potencia
necesaria para rechazar la radiación que emana de un núcleo atómico localizado
en el centro. Este emisor recibe todo el impacto de una descarga de alta
energía que retiene la radiación para causar la reacción atómica en cadena.
Como
anotación al margen, debemos agregar que la resonancia de las fuerzas que
gobiernan las partículas, es aplicable a otro diseño de dispositivos más
sencillos y más compactos del que hemos estado describiendo. Por ejemplo, una
oscilación resonante de la energía de las partículas hace que estas salgan de
su estado de equilibrio. El fenómeno emplea la teoría, relacionada con los
niveles de energía de los átomos.
RESULTADO FINAL
El efecto
implosivo concentra su potencia en relación geométrica a medida que se aproxima
al punto de enfoque. De esta manera arrastrará con la energía radiante quien
seguirá el mismo mecanismo de concentración sumándose al tren implosivo.
Cuando la
energía se haya agrupado, los átomos entrarán en intensa actividad y agitación.
La estabilidad interna del átomo se romperé debido a la temperatura, presión y
agitación. Además estarán presentes un gran número de partículas retenidas
saturando el núcleo y espacio interatómico.
La
condición interior llega a ser de un gran caos donde las estructuras atómicas
se romperán liberando más partículas que actuarán sobre otros átomos generando
la reacción en cadena.
En los
cuerpos celestes la concentración se da de manera natural por el fenómeno de
fuerzas gravitatorias crecientes. En la medida que la materia se condensa
aumenta el campo de la atracción. Los átomos llegan a colisionar liberando
formas de energía que desencadenan una explosión dando lugar al nacimiento de
las estrellas. El mecanismo es efectivo por tratarse de gigantescas masas de
materia con indescriptibles fuerzas.
En nuestro
caso, la implosión reemplaza las fuerzas de atracción sobre un material
sensible, así sea en ínfima cantidad, dispuesto para tal fin, pero todo el
conjunto actúa en semejante al de las estrellas.
Tenemos la
gran ventaja, sobre el proceso natural, de haber seleccionado elementos que
contribuyen con sus emisiones a la autodestrucción atómica sin tener que
recurrir a grandes fuerzas gravitatorias. En la evolución de la materia estelar
están presentes diversos elementos que solo pueden mutarse bajo condiciones en
extremo descomunales y no reproducibles en nuestro medio para aplicaciones
prácticas.
SEGUNDA PARTE
GENERALIDADES DE LA FUSIÓN
En la
actualidad existen mecanismos sofisticados y complejos para lograr la
fusión. Para facilitar la comprensión de la forma de un diseño
básico, partiendo de las primeras generaciones de artefactos atómicos.
Pretendemos seguir la secuencia que permitió desarrollar este conocimiento y
que proviene del perfeccionamiento de los dispositivos primarios.
Si el
rompimiento de un átomo pesado para formar estructuras atómicas más simples y
livianas libera energía, también puede hacerse por medio de la fusión de
átomos. Es necesario que estos se agrupen para crear un elemento más complejo
pero de masa atómica menor que la suma de las masas iniciales. La diferencia entre
estas masas es la materia que se disipará en forma de energía.
Fusionando
considerables cantidades de átomos, en corto tiempo, causa una liberación de
tanta enérgica que no es factible hacerlo de forma controlada. Después de
generada la fusión masiva de átomos, no se puede regular ni almacenar con los
medios actualmente conocidos. El resultado es una explosión que
proviene de la energía liberada.
SISTEMA INICIADOR
La fusión,
y la fisión son fenómenos inversos y podemos aplicarlos de manera relativa. La
forma de causar una fusión atómica significativa e instantánea es con el empleo
de un dispositivo de fisión que genere las condiciones requeridas.
La fisión
causa la fusión atómica y esta a su vez produciré la reacción en cadena que
liberará mayores cantidades de energía. La fuerza del tren implosivo resultará
magnificada a niveles observados solo en los fenómenos cósmicos.
REACCIÓN POR FUSIÓN
Una
reacción por fusión es una liberación masiva de radiación y alta agitación
atómica que cause temperaturas de millones de grados y una intensa presión. Así
tendremos un punto de energía similar a los cuerpos cósmicos emisores de luz y
calor. En otros términos estamos creando una microestrella.
Elementos
con las características apropiadas como el Hidrógeno, sometidos a estas
condiciones, se fusionan evolucionando a otras formas de la materia. Esta
transformación se logra por ligazón de átomos para constituir estructuras de
mayor complejidad. El fenómeno libera, en forma de energía, los elementos que
no le sean necesarios para conformar la nueva estructura.
El
Hidrógeno es el primer elemento de la tabla periódica. Su estructura atómica es
la más sencilla de todos puesto que solo consta de un electrón y de un protón.
La fusión de dos átomos de Hidrógeno conforma un átomo de dos electrones y dos
protones correspondiente al Helio. La energía solar se produce por este medio y
lo que se pretende es repetirlo pero en miniatura.
Existen
formas de Hidrógeno que contienen Neutrones no indispensables para formar el
átomo de Helio y se fugan cuando se produce la fusión.
Usando
isótopos pesados de Hidrógeno se liberan estos Neutrones bombardeando otros
átomos activando la reacción en cadena creciente.
Por medio
de procesos químicos y físicos se obtienen isótopos como el Tritio y el
Deuterio. Estas formas del Hidrógeno tienen tres y dos Neutrones en su núcleo
que en el proceso de Fusión crean una intensa radiación.
La idea
final consiste en descargar las fuerzas de la fisión del Uranio o de un tren
implosivo de gran potencia, para que asocie átomos de Hidrógeno pesado causando
una fusión en cadena. Así la materia básica se transforma en otra estructura
atómica menos pesada, el helio, de la misma forma como sucede en las estrellas.
EFECTOS
Todo el
proceso termina formando un globo de Plasma que contiene energía distribuida en
forma de presión, calor y radiación. La presión se manifiesta en una potente
onda de choque que se propaga en la atmósfera circundante. El calor y la luz
son muy intensos cubriendo una extensa área. La radiación es de efecto
prolongado por su permanecía en el medio ambiente.
CAMPO TÉCNICO
Teóricamente
el diseño de un dispositivo atómico no es tan complejo como normalmente se
piensa. Incluso la tecnología actual permite la miniaturización para su manejo.
El
principal obstáculo no está en el diseño sino en el campo económico y los
procesos industriales requeridos. Con las perspectivas y tendencias de progreso
del país, pensamos que en el futuro no lejano, dispondremos de esas
capacidades. Mientras esto sucede, paralelamente debemos mantener actividad
investigadora así sea en el campo teórico. Las improvisaciones de último
momento no se justifican si estamos en condición de hacer las previsiones del
caso.
El solo
hecho de manejar la información aporta una ventaja comparativa importante,
porque de ella se parte para emprender un proyecto. Esperar que sea demasiado
evidente la necesidad para arrancar de la nada, es una actitud inaceptable.
Tendríamos que recorrer todo el camino en condiciones de apremio impuestas por
una amenaza inminente.
TENDENCIA ATÓMICA MUNDIAL
La
fabricación de dispositivos atómicos ya está al alcance de países no
desarrollados como la India, la China, Pakistán, Corea del Norte. Esta
tecnología se está difundiendo rápidamente con la creciente instalación de
reactores para generar electricidad y por la cantidad de personas conocedoras
del tema, que buscan países donde aplicar sus conocimientos.
Los pactos
de desarme entre las potencias están dejando sin ocupación a la actual generación
de investigadores, que trabajan con armas no convencionales, dispuestos a
asesorar a quien los contrate.
Tan solo en
el este asiático existen actualmente más de cien (100) reactores en
funcionamiento con Plutonio en países como Indonesia, Malasia o Vietnam.
Los materiales radiactivos son sacados clandestinamente de las plantas atómicas por el personal cuando tienen necesidades con la complicidad de una seguridad inefectiva y desmotivada. Sustancias empleadas en otros propósitos de naturaleza pacífica. Pero también los desvían en otras aplicaciones de seguridad nacional.
Cuando el racionamiento de energía a nivel nacional nos hizo pensar en la generación eléctrica con medios atómicos, no podemos dejar pasar por alto que, simultáneamente podemos obtener el material aplicable en la defensa nacional. Por otra parte, ahora es factible conseguirse en los países con alta disponibilidad y con dificultades para deshacerse de él por los efectos de contaminación.
CAMPO POLÍTICO
Es nuestro
deber hacer el esfuerzo mínimo que nos permita la fuerza disuasora como
respaldo a la política de negociación contra las pretensiones externas sobre
nuestros intereses nacionales. Ya nos podemos imaginar las condiciones que nos
serán impuestas por naciones potencialmente hostiles y que, sumisamente,
tengamos que aceptar por no tener la capacidad de respuesta. Ignorar dicha
realidad es dejarnos sorprender en el campo de la seguridad nacional en la
misma forma como sucedió con el sector eléctrico.
Las
naciones con capacidad nuclear o próxima a adquirirla, tienen un trato especial
en el contexto mundial en todos los órdenes. Se crea respeto por su modo de
vida e ideologías sociales. Las consideraciones económicas y comerciales son
preferenciales. La tecnología para el desarrollo y bienestar de todo el país se
intercambia con mayor facilidad. Se adquiere respetabilidad política y
aceptación como nación en vía de desarrollo técnico y científico.
Los países
no desarrollados tienden, por instinto, a adherirse a los fuertes, para
acogerse a su seguridad y capacidad de influencia internacional. Motivo por el
cual tenemos que pensar en ser una nación fuerte. Al mismo tiempo los más
dotados y ricos se agrupan en círculos para defender su progreso y altos
niveles de calidad de vida. Ingresar estas sociedades y bloques de poder se
logra distintas formas. Pero en lo relativo a lo militar, se da por la
tecnología las armas con la influencia que esto implica a nivel mundial.
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